
El Ayuntamiento de Guadalajara siempre es objeto de noticia, máxime en este invierno, tan animado en lo informativo. // Foto: B. M.
Por Borja Montero
No esperen, debido al título elegido para este artículo, la narración de las vivencias amorosas, unas más censurables que otras, de un hombre de alta sociedad. Eso ya lo hizo el maestro Ramón María, gigante de la pluma, lejos del tamaño literario del plumilla que firma estas líneas. Sin embargo, juguemos a eso de contar historias, aunque se de forma más breve. Y es que este invierno, que lo es a pesar de que el mercurio nos lo niegue una y otra vez, está siendo especialmente entretenido en la provincia de Guadalajara en lo que a información fresca se refiere. Vamos con unas cuantas cosas que han pasado en los últimos días.
Movida (en la) vida municipal. La nueva composición del Pleno en el Ayuntamiento de Guadalajara ya ha deparado, en apenas ocho meses de legislatura, algunos momentos que hacían presagiar una vida tremendamente movida en la política local. Sin embargo, en los últimos días, la situación de ‘minoría mayoritaria’ del Gobierno de Antonio Román ha sufrido diversos vaivenes. El primero, la dimisión del concejal Ángel García, que ya he tenido que enfrentarse, en sus pocos meses al frente de la cartera, a una exhumación en el Cementerio, una moción sobre el Mercado Municipal, las elecciones en los barrios anexionados y un derrumbe en Villaflores. Esto se resuelve fácilmente: corre la lista y entra el siguiente: Carmen Heredia, en este caso (aunque no sería descabellado que renunciara para dejar paso a José Luis Alguacil).

Imagen de Román y Ruiz tras su reunión para el acuerdo de investidura. // Foto: C’s Guadalajara
La otra situación es más peliaguda, como bien analizaba mi compañera Concha Balenzategui. Como ya abordamos hace algunas semanas, el alcalde de Guadalajara, poco habituado a la cintura que exige la nueva correlación de fuerzas en el Pleno y a las consiguientes decisiones contrarias a sus ideas que pueden devenir de ella, estaba retrasando la puesta en marcha de las mociones propuestas por otros grupos políticos y aprobadas por el Pleno. Tras varios meses viendo cómo se acrecentaba la situación, los otros tres partidos, catorce concejales mediante, se han unido para afearle públicamente la conducta al primer edil de la capital en una rueda de prensa. Precisamente por esta incómoda situación para el Equipo de Gobierno, el alcalde ha ofrecido un acuerdo a Ciudadanos (C’s) para que entre a formar parte del Ejecutivo local, de modo que las votaciones plenarias no serían una incógnita y se pondría fin a las mociones incómodas. Sin embargo, parece que la formación naranja no está por la labor de complicarse la vida adquiriendo responsabilidades de gestión cuando dispone de grupo propio y liberaciones más que suficientes.
La ‘moda’ de la participación. Hace unas semanas, la noticia saltaba en Torrejón del Rey, lugar en el que iban a someter a votación entre sus vecinos la conveniencia o no de que el Consistorio siguiera haciéndose cargo de los gastos devenidos de los festejos taurinos. El referéndum tendrá lugar el próximo 13 de marzo. El PP de la localidad, a pesar de que sus homólogos provincial, regional y nacional no son especialmente partidarios de consultas ciudadanos y otros procesos democráticos, se ha puesto manos a la obra para recabar apoyos para el “sí” al mantenimiento de la financiación pública a los encierros y, lo que es más sorprendente, ha pedido que este procedimiento de decisión, el de las urnas, para abordar otros debates, como el de los asesores políticos en la administración local.
Todo limpio. Por más que lo intentan vecinos y, sobre todo, partidos políticos (contra los contrarios, se entiende) con sus denuncias, Guadalajara no tiene aún su caso de corrupción, como cualquier otra provincia de España. Si en Azuqueca de Henares se preveía el final anticipado de la historia judicial alrededor de las obras del Centro Joven, ya que solamente buscaba poner en tela de juicio el nombre de los alcaldes (el anterior y el actual) de la localidad de cara a las diversas citas electorales de 2015 (por aquello de llevar imputados en las listas), ahora es el alcalde de Jadraque, Alberto Domínguez, el que respira tranquilo después de que la Audiencia Provincial haya archivado la causa en la que se le acusaba de prevaricación por contratar el suministro de gasoil para las dependencias municipales con una empresa de su familia. Como en el caso azudense, la denuncia estaba interpuesta por el rival político del primer edil y su objetivo era más enturbiar (las elecciones municipales) que clarificar (la gestión del munícipe). Nada de Malayas, Púnicas, Taulas o Palma Arenas en el horizonte.

Los centros de salud ya han comenzado a expedir las tarjetas para los inmigrantes en situación irregular. // Foto: SESCAM
La sanidad vuelve a ser para todos. El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) ha comenzado ya a expedir las tarjetas humanitarias de atención sanitaria para los inmigrantes en situación irregular, que fueron apartados de esta prestación en septiembre de 2012. A pesar de que no se les hace usuarios de derecho del servicio, sí se les devuelve la posibilidad de acudir de forma habitual al médico de cabecera y ser atendidos y seguidos por especialistas en caso de molestias más graves, y esto será posible gracias a una acreditación que tendrá que ser renovada cada año, como forma de control y ante la posibilidad de que el beneficiario cambie de status (regularice su situación o regrese a su país de origen). Se trata de una deuda de la gestión sanitaria nacional para con los derechos humanos y el código deontológico de médicos y enfermeros.