Turismo de brujas

Monasterio de Monsalud en Córcoles. /Foto: monsaludyercavica.es

Por Míriam Pindado

Ayer se abrió una campaña de crowdfunding para financiar un singular proyecto en el Monasterio de Monsalud del que seguro ya habrán escuchado algo. Se trata de una iniciativa privada que, con el apoyo de entidades locales, pretende crear un centro museístico en el monasterio cisterciense de principios del siglo XII dedicado a las brujas de la zona.

El futuro ‘Museo de las Brujas de la Alcarria’, que tendrá una exposición permanente en el cenobio de Córcoles además de paneles informativos en otros pueblos de Guadalajara y Cuenca, pretende recabar con esta campaña de micromecenazgo un total de 3.500 euros en 40 días a través de la platataforma Verkami para costear parte del proyecto.

Portada de la campaña. / Foto: verkami

Su promotor es Javier Fernández Ortea, arqueólogo y gestor del monasterio románico de Monsalud, en Córcoles, y del yacimiento romano de Ercávica, en la cercana localidad conquense de Cañaveruelas. Y su objetivo no es otro que  revitalizar la zona de los pueblos ribereños. “Buscamos nuevos enfoques que permitan hacer más atractiva la visita a La Alcarria, una región con graves problemas de despoblación y cuyos efectos en los trasvases de agua también han supuesto un duro golpe al turismo”. Con estos argumentos -expuestos en la plataforma- se invita a colaborar a los interesados en este ‘Museo de las Brujas de La Alcarria’. “Un nuevo recurso que sea un motor de desarrollo local” y “un elemento diferenciador” que sumaría rigor histórico, experiencias sensoriales y tecnología 3D al servicio de la brujería y las brujas de La Alcarria.

Rigor histórico

Conocedores de la histórica presencia de brujas en esta zona, los artífices del proyecto decidieron iniciar un proceso de documentación especialmente localizado en el Archivo de la Inquisición de Cuenca y en el Archivo Histórico Provincial. En un artículo publicado el mes pasado en Culturaenguada, Javier Fernández admitía que “lo que hizo saltar la chispa” fue precisamente el gran número de historias sobre hechiceras en el entorno del monasterio además del libro del dramaturgo Domingo Miras ‘Las brujas de Barahona’ “donde se hablaba del propio cenobio como uno de los lugares donde se juzgaba a las brujas”.

‘El Aquelarre’, de las Pinturas Negras de Francisco de Goya.

Esta idea de reanimar a las brujas –a las buenas y a las malas- de La Alcarria no es un caso aislado. Cabe recordar que hace un par de años, la historiadora María Lara Martínez (Guadalajara, 1981) publicó el libro ‘Brujas, magos e incrédulos en la España del Siglo de Oro’ (Alderabán, 2013). La investigadora y escritora afirmaba que hay registrados casos de brujas en localidades como Pareja, Sacedón, Córcoles, Alocer, Tinajas, Villanueva de Guadamejud, Cañizares o Villalba del Rey. Según María Lara, profesora de Historia y Antropología de la Universidad a Distancia de Madrid,  estas brujas y hechiceras fueron reales y convivían con sus vecinos puerta con puerta. De entre todas las historias recogidas, destacamos por proximidad la de las brujas de Pareja del siglo XVI. Tal y como expuso la historiadora en el I Congreso Solidario Guadalajara Misteriosa celebrado en el mes de noviembre en Guadalajara, estas brujas estaban “acusadas por allanamientos de morada, por andar por los tejados de noche con la intención de entrar a las casas con fines perniciosos”. Según sus pesquisas “las brujas perversas” echaban “sueño” (sustancias similares a la burundanga) a los habitantes de la casa para robarles o asaltar las cunas –cuentan que los niños servían para fabricar sus pócimas-.

Este es solo un ejemplo de las historias de brujas y hechiceras registradas en la provincia. De hecho, detalles de este episodio y otros tantos documentados en los pueblos de La Alcarria,  tendrán su espacio en la exposición ‘Brujas de La Alcarria’.

 

Experiencia sensorial

Simulador de vuelo de brujas. / Foto:

Este proyecto apuesta por lo sensorial. De hecho, el equipo de arqueólogos e ingenieros informáticos que están trabajando en él ha cambiado los psicotrópicos por las nuevas tecnologías para simular las experiencias de las brujas. De esta manera, los ávidos y curiosos visitantes podrán volar en una escoba, ser sometidos a un interrogatorio en un cepo o a la quema en la hoguera a través de gafas cardboards, drones y sistemas de realidad aumentada.

Tal y como explican los impulsores de este proyecto en la campaña de crowdfunding, la exposición contará con diferentes tipos de recursos expositivos. Por un lado,  paneles que ilustrarán el proceso documental de la muestras. Por otro, la reproducción de elementos clave como el cepo para el escarnio público, el potro de tortura o el san Benito, algunos de ellos reforzados con nuevas tecnologías.

El Monasterio de Monsalud

Este Monasterio se encuentra en la localidad alcarreña de Córcoles, a 115 km de Madrid, 59 de Guadalajara y 76 de Cuenca.
Se trata de uno de los ejemplos más majestuosos de la presencia de la Orden del Císter en la Península Ibérica y fue construido hacia 1167 a expensas del rey Alfonso VIII. El cenobio se localiza en un entorno privilegiado a tan solo cinco minutos de Sacedón. El de Monsalud fue el primer y más antiguo monasterio de la provincia junto a los de Bonaval, Buenafuente del Sistal y Óvila, siendo el mejor conservado de todos.

Su momento de mayor esplendor data de mediados del siglo XVI, pero lentamente fue perdiendo importancia hasta que en 1835 fue suprimido con la Desamortización de Mendizábal. Declarado Bien de Interés Cultural desde 1931,  ha sido objeto de varias restauraciones en las últimas décadas por parte de la Junta de Castilla la Mancha que finalmente adjudicó su gestión en marzo de 2014 a la empresa cuyo titular es Javier Fernández Ortea.