
Previsión de la Agencia Estatal de Meteorología para estos próximas días. // Aemet.es
Por Álvaro Nuño.
Aunque a los de Guadalajara nos parezca mentira tras un día de fiesta total y ya inmersos en el viernes de la Semana Grande, el mundo sigue girando y el resto del país parece que corre a otro ritmo que el de los habitantes de la capital, que parecemos pensar sólo en estos días en con quién vamos a quedar y dónde para pasárnoslo lo mejor posible. La oferta esta semana es amplia y variada y hasta hoy el tiempo ha acompañado con las salvedades de un viento un poco fresco y alguna noche más fría de lo normal. No en vano, entre el vestuario de las peñas, aquí nunca ha faltado la bata o la sudadera -ambas prendas de manga larga-, conscientes de que en este mes de septiembre, a partir de cierta hora la manga corta se queda demasiado corta. También no son pocos los que piensan que el primer cohete del primer encierro del jueves rasga el cielo de Guadalajara y eso llama a la lluvia.
Y es que en Guadalajara, el verano no termina realmente hasta que los fuegos artificiales iluminan la noche del domingo de Ferias. Hasta ese día, ni vuelta al cole, ni nada de nada. Este año además, con estos dos días seguidos de fiesta, los escolares ni siquiera han tenido tiempo de conocer a sus nuevos profesores. El lunes, primer día de cole por la mañana y desfile de carrozas por la tarde; el martes, todos los parques llenos de actividades infantiles organizadas por las peñas; y el miércoles la llegada de la Vuelta Ciclista a España, con media ciudad cortada casi todo el día. No digan que esa es forma seria de entrar en materia y de concentrarse en la materia. Y jueves y viernes, ¡vacaciones otra vez! Es mejor esperar al lunes 16, cuando la rutina del curso se impondrá definitivamente.
En buena medida, el éxito de unas fiestas depende del tiempo meteorológico. Sol y calorcito llenan las calles de público, como ha sido el caso hasta ahora. Sin embargo, la amenaza de lluvia retrae a la gente de hacer planes al aire libre, aunque haya carpas y techados. Y a pesar de que las fiestas de Guadalajara se han ido adelantando acertada y progresivamente en el calendario, primero con el alcalde Irízar, desde el mes de octubre de la antigua Feria de Muestras hasta la tercera semana de septiembre -ya en otoño- y después con Román a la segunda -todavía verano-, que es en la que estamos ahora, parece que la lluvia está esperando a que salgan los toros del encierro y suene la música de charangas y verbenas para hacer acto de presencia por aquí.
Sin ir más lejos y sin querer ser agorero, la Agencia Meteorológica prevé para estos días que sigan bajando las temperaturas progresivamente y que la probabilidad de que llueva a partir de hoy por la mañana, ascienda del 0% de ayer jueves y de esta noche al noventa por ciento hoy viernes y al 100% sábado y domingo. Esperamos que los meteorólogos se equivoquen y que la tan necesaria lluvia se retrase al lunes de la semana que viene, cuando agradeceremos su presencia.
En cualquier caso, deseamos que lo que tenga que pasar en Guadalajara no sea ni parecido a la gota fría que están sufriendo en el Levante y que ha arrasado con pueblos, carreteras y campos, con dos víctimas por el momento arrastradas por el agua y hasta la rotura del trasvase. El Segura, a donde mandamos el agua desde el Tajo, está en situación de alerta roja por amenaza de desbordamiento y nos imaginamos que alguien cerrará el grifo del trasvase en esta lamentable situación.
Desde luego es mejor seguir viviendo la fiesta y aprovechar para dormir cuando se sale del encierro, se termina el baile-vermú o se llega por la noche tras bailar en la verbena y correr el toro de fuego que enchufar la televisión, porque no cuenta más que desgracias. ¿Cómo llevan Pedro y Pablo el asunto del acuerdo entre PSOE y Podemos para formar Gobierno? Pues realmente mal. Todo parece que el «Pobre de mí» que se cante en la Plaza Mayor el domingo 15 se alargará por lo menos una semana, cuando se aclare definitivamente si habrá nuevas elecciones en noviembre o no. Que se sigan pegando y no sean capaces de llegar a acuerdos puede incluso entenderse dentro de la dinámica enrarecida de la política actual, pero lo malo son las consecuencias de este bloqueo que dura ya desde 2018. Por ejemplo, un informe de la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales alerta de que el gasto social medio de las comunidades autónomas es un 3,4% inferior al de hace una década. Este incluye las partidas de Educación, Sanidad y Servicios Sociales y Castilla-La Mancha se encuentra entre las que más se ha recortado estas partidas con una reducción del 15,46%. El informe achaca esta bajada a la paralización de los Presupuestos Generales del Estado antes de la convocatoria de elecciones, y la incidencia de la deuda autonómica -aunque hay regiones que han subido estos gastos en vez de bajarlos-, asuntos ambos que sin Gobierno central son difícilmente solventables.
Ante este panorama de problemas es mejor no encender la televisión ni la radio hasta que llegue el lunes 16 -exceptuando el Mundial de Baloncesto de China en el que España puede vencer de nuevo-. ¿Para qué sufrir mientras tanto pudiendo disfrutar de nuestras Ferias y Fiestas? Ya nos toparemos con la cruda realidad de bruces cuando toque. Hasta entonces, ¡felices Ferias a todos y que el tiempo acompañe!