¡Agua va!

El Rugby Guadalajara XV Jabalí. Foto// lacrónica.net

Por Sonsoles Fernández Day

La tentadora ventaja que tiene escribir en un blog de opinión es que puedes hacerlo de lo que te dé la gana. De igual manera, el peligro que esto conlleva es meterte en un jardín del que te puede costar salir.  Poco a poco voy acumulando información leyendo lo que se publica en los diarios locales y escuchando a mis amigos que me cuentan sus vivencias y mosqueos variados. No voy a vaciar el orinal por la ventana al grito de ¡agua va!, no conviene sacar más porquería y además yo soy muy limpia, a mí me encantaría echarle a alguno un cubo de agua helada por la cabeza, cual iced bucket challenge pero sin fines solidarios, más bien una llamada de atención.

No queda mucho por decir de la tromba de agua caída en Guadalajara y sus consecuencias. La fuerte tormenta que cayó en la tarde del domingo provocó numerosas incidencias en la capital y en los pueblos de alrededor. Parece que los servicios de emergencia actuaron con rapidez, rescatando a las personas que se quedaron atascadas en sus coches, limpiando vías inundadas y desalojando el agua de portales y garajes. El alcalde, Alberto Rojo, anunciaba que estaban preparados para otra posible tormenta y pedía colaboración ciudadana y prudencia. Lo de siempre. Cuando venga la catástrofe, ya lo solucionaremos como sea. Mientras tanto, los que viven en la parte baja de la ciudad, en las proximidades del río o cercanos a la cuenca del canal del Henares, y los que se compraron una casa en un cruce de calles con ligera pendiente, que se vayan haciendo un buen seguro y que no guarden muchas cosas en el sótano, porque tendrán que volver a tirarlo todo cuando la naturaleza se desmadre. No es casualidad que siempre se inunden las mismas zonas o los mismos garajes, pero no se hace nada entre tormenta y tormenta. En mitad de la tromba, una mujer compartía en una red social fotos del interior de la estación de autobuses. Decía que estaba lloviendo fuera y dentro de la estación, las paredes parecían las fuentes del Nilo. Me pregunto si sólo habrán secado el suelo o habrá un proyecto de mejora del edificio. Si vuelven las lluvias torrenciales lo sabremos.

Comenzó el curso escolar y  el delegado de Educación, Cultura y Deportes, Ángel Fernández Montes anunciaba a bombo y platillo que el nuevo curso contará en la provincia con un incremento del profesorado y centros educativos renovados. Estaba yo en el gimnasio en clase de Stretch, que no es otra cosa que estiramientos, pero como es un centro de fitness lo llaman así, cuando una de mis compañeras comentó que en el instituto de Cabanillas han tenido que habilitar barracones porque no hay aulas suficientes y que algunas aulas reúnen hasta 42 alumnos. Otra dijo que al menos allí tienen aire acondicionado, todo un lujo. Entre torsión y torsión me fui enterando de cosas y he preguntado después por ahí. Los profesores están hartos de pedir y no conseguir nada. En los institutos de la capital también llegan a los 38 alumnos en  bachillerato, pero eso no es lo peor, los edificios necesitan urgentemente reformas. El Liceo Caracense ha tenido que cerrar alguna de sus aulas después de las últimas lluvias por riesgo de derrumbe. Es un hermoso palacio de principios del siglo XVI, pero eso no justifica que se esté cayendo abajo. Antes, al contrario, debería mimarse como una de las joyas de la ciudad. Me han comentado incluso que el presupuesto no les da ni para pagar las facturas de la luz. A ver esas mejoras, señor delegado.

El alcalde de Guadalajara quiere que los encierros de la ciudad sean declarados Fiesta de Interés Turístico en Castilla-La Mancha. Alberto Rojo asegura que nuestros encierros, que han cumplido cuarenta años, cumplen todos los requisitos. Ese sí que es un jardín. La semana pasada falleció un hombre de 84 años después de ser corneado por un toro en un encierro por el campo en Horche. Es diferente, en el campo no hay control, pero también dramático. Después leí un comentario de un paisano suyo que me pareció aún más sorprendente: “murió haciendo lo que más le gustaba”. Cuesta creerlo pero es la prueba de que cada uno es muy libre de hacer lo que quiera. Yo nunca correría delante de un toro poniendo en riesgo mi vida, menos aún una manada, pero allá cada cual. Prefiero hacerlo con un dorsal, que no es tan peligroso, aunque es cierto que alguna vez, desgraciadamente, muere un corredor en un maratón, incluso en carreras más cortas, pero no por ello habría que prohibirlas. En cualquiera de los dos casos la participación es voluntaria, debería haber una buena organización y control del recorrido, y los participantes han de estar física y mentalmente preparados. A partir de ahí, va en gustos y opiniones. Aún así sería mejor, señor alcalde, pedir las subvenciones para arreglar las goteras de nuestro patrimonio, que también es de interés turístico.

Hablando de runners, Melendi no se acordó de nosotros. Imagino que la comunicación con la agencia que lleva su twitter es nula. No importa, ya he cambiado de música y no tengo más que decir al respecto.

Y como dicen mis primos, last but not least, en cristiano, por último, pero no menos importante, tengo que nombrar al RugbyGuadalajara en todas sus categorías. En este caso soy yo la que se tira el cubo de agua por la cabeza porque no hablé de ellos cuando escribí sobre las pistas de la Fuente de la Niña y me llamaron la atención, porque ese es su lugar de entrenamiento desde hace 25 años y en septiembre se quedan sin  césped. Están entrenando en el campo de fútbol de hierba artificial pero ni es el medio ni el espacio adecuado, y allí estarán hasta pasado octubre porque el césped después de los conciertos de Ferias está destrozado. He coincidido varias veces con ellos y reconozco que se me hacían las series más entretenidas, no sé cómo pude olvidarme de esos cuerpos serranos… Lo siento. A cambio, os dedico la foto de portada que decora muy bien mi artículo.

La semana que viene escribiré sobre lo bonita que está la provincia de Guadalajara en otoño, sus pueblos y sus paisajes. Todo muy relajado y relajante. Lo prometo.

1 comentario en “¡Agua va!

  1. Gracias por la mención, Sonsoles. Es cierto que uno de los mayores damnificados , sino el mayor, de los conciertos en la FdN es el Rugby.Guadalajara. Año tras año nos quedamos sin poder usar las instalaciones, imprescindibles para entrenar y jugar, hasta bien entrada la temporada, perjudicando los resultados deportivos iniciales (imagina preparar una maratón en un espacio donde solo puedas correr, digamos, 100 metros seguidos… ¿complicado verdad)
    Un admirado rugbier.

    Le gusta a 1 persona

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.