
Tenorio Mendoncino. // Foto: David Blázquez
Por Felipe Sanz Sebastián
Mi andadura con Gentes de Guadalajara comenzó en el año 2001. Alguien conocido dentro del grupo me ofreció un traje y acepté, no con ninguna ansia artística, sino como homenaje íntimo a un veterano actor aficionado, mi padre, fallecido ese mismo año.
Llegué al Tenorio en unos años de transición, en los que éste buscaba su ubicación dentro del imaginario de la ciudad. Llevaba recorriendo 11 años las calles y, aunque, afianzado ya como un evento de Guadalajara, le faltaba dar el paso para situarse como “cita imprescindible”.
En aquellos años, se buscaba dar contenido a la “Evocación de la Guadalajara del S. XVI” que se fijaba en la plaza de Santa María y se quería dar mayor cabida a los personajes mendocinos en los tránsitos y escenas. Con este fin, se optó por dirección profesional, de pago. Lo haría en dos ocasiones, Fernando Romo; y en otra más, José Luis Matienzo: experiencias positivas y que sirvieron para trazar y ubicar la ambientación en la hostería y el inicio de los Previos o introducción representada del espacio donde se desarrollaría la escena.
Fueron pasando años con eternas noches en el España, donde se pergeñaban escenas, atrezzos, figuraciones… , charlas con Josefina, Javier Borobia, Josepe , anécdotas de Borlán y, discusiones que, aunque en más de una ocasión fueron agrias, han servido para llegar a acuerdos en beneficio de la representación.
Se confeccionó el vestuario -por empeño y trabajo personal de Josefina y Javier Borobia- lo que, además de incrementar el patrimonio de Gentes de Guadalajara, supuso un ahorro considerable en el presupuesto para así poder destinar más recursos económicos a una de las grandes preocupaciones (que lo sigue siendo) de todas las ediciones: luz y sonido. Las dificultades que tiene el sonorizar seis espacios al aire libre sólo podían solucionarse con más medios y eso, por muy románticos que seamos, sólo se consigue con más dinero; y el resultado de los últimos años, aunque con algún problema puntual, ha sido más que satisfactorio, para beneficio del espectador y, por qué no decirlo, alivio nuestro.
Los años nos han ido trayendo nuevas generaciones y con ellas algún que otro problema y muchas satisfacciones. Si hasta ese momento los papeles de la obra eran más o menos estables, la entrada de savia nueva hacía necesario buscar un hueco para esta. Desde la Asociación se ha buscado la manera de dar cabida a todo aquel que se acerque con ánimo de participar. Su colaboración puede ser bien como actores en la obra, bien como actores de Previos o en las visitas teatralizadas que realizamos en colaboración con la Oficina de Turismo bajo el nombre de “Jornadas Mendocinas” y que se suelen llevar a cabo el fin de semana anterior a la representación del Tenorio o, como en este año, en dos sábados: el 26 de Octubre y el 2 de Noviembre.
De estas nuevas generaciones han surgido miembros nuevos para la Asociación y nuevos componentes para la Junta Directiva con puestos de responsabilidad en la organización. Por citar solo un ejemplo, la edad de los responsables de atrezzo y vestuario está por debajo de los 30 años. Estas sucesivas incorporaciones garantizan la continuidad de la Asociación y del Tenorio mismo.
Y así llegamos a una nueva edición del Tenorio Mendocino. Cuando el próximo día 1 de Noviembre oigamos el “Cuán gritan esos malditos” ustedes disfrutarán de un espectáculo en el cual 150 participantes han invertido gran parte de su tiempo libre y todo su entusiasmo desde hace un mes y medio, algunos desde el mes de Julio, cuando se hicieron las audiciones para seleccionar el reparto. Les invito a que disfruten de los versos, de la noche y de los monumentos de esta nuestra QUERIDA Guadalajara.
Para nosotros lo más importante siguen siendo las gentes de Guadalajara, los que actúan y los que asisten, porque todos, actores y espectadores, somos componentes de este Tenorio que no sería lo mismo sin los guadalajareños, su ciudad y sus monumentos. Y aunque en alguna ocasión nos recuerdan que hemos olvidado el Rito, solo ha evolucionado con los años ya que cualquier tiempo pasado no fue mejor, solamente diferente y al igual que en los noventa no había móviles inteligentes, internet, redes sociales o prensa digital, el Tenorio en sus formas cambia pero no en su espíritu.
Felipe Sanz Sebastián (Guadalajara 1964), Presidente de la Asociación Gentes de Guadalajara desde mayo 2019, vocal en la junta directiva desde 2015, participante en las actividades de la Asociación, Tenorio Mendocino, desde el año 2001 como responsable de Espacios Escénicos.