
Foto: EFE
Por Gloria Magro.
El reconocimiento oficial y público a los luchadores antifascistas es una presencia constante en pueblos y ciudades de toda Europa desde hace décadas. Y sin embargo, hasta ahora Guadalajara no se ha sumado a ese homenaje de una forma clara y contundente pese a lo simbólico del nombre de la ciudad en la derrota del fascismo, el lado bueno de la Historia.
La Guerra Civil, la represión, el exilio y la lucha antifascista son el eje que va a vertebrar las jornadas culturales Memoria contra el Olvido que acaba de presentar el Ayuntamiento de Guadalajara, al objeto de «divulgar unos hechos históricos que ocurrieron, que forman parte de nuestro pasado reciente y que nos invitan a reflexionar mediante el cine, el teatro, la música y la poesía», en palabras de la concejala de Cultura, Riansares Serrano. Para el representante municipal de VOX se trata, por el contrario, «de revancha, ajuste de cuentas y enfrentamiento entre bandos y entre guadalajareños», por lo que pide la retirada del ciclo.
Este pasado mes de agosto se cumplía el 77 Aniversario de la Liberación de París, donde la fotografía del tanque Guadalajara, el primero en llegar hasta el Ayuntamiento parisino, es una de las imágenes simbólicas que se asocian desde entonces a la derrota del nazismo en Europa. Sin embargo, el reconocimiento a los españoles que sirvieron a la causa universal de la libertad y la democracia en el ejército francés y llevaron el nombre de Guadalajara a la primera página de la Historia no solo no está inscrito con letras de oro en nuestra ciudad, sino que recordar desde las instituciones estos y otros hechos igual de contrastados, aceptados, valorados y reivindicados en todo el mundo desde hace ochenta años es motivo de oposición frontal para el grupo municipal de VOX, al igual que durante muchas legislaturas lo fue para el Partido Popular.
La memoria colectiva, su significación histórica y el contexto de la lucha por los derechos y las libertades democráticas están en la base de un extenso programa artístico gratuito (*) en los teatros Moderno y Buero Vallejo. Las actividades programadas del 23 al 26 de septiembre incluyen la presencia de expertos, escritores, cineastas, políticos y personalidades destacadas en representación de distintos colectivos de reconocido prestigio, incluyendo a los Amigos de Mathausen, el Patronato Abogados de Atocha o la Asociación de Descendientes del Exilio Español, entre otros. Para el coordinador de las jornadas, Israel Calzado López, «se trata de hablar de la memoria desde un punto de vista cultural y artístico a través de la palabra, del debate, de la música y el teatro y ojalá tengan continuidad en el tiempo”. Sin embargo, desde la oposición municipal, VOX no ha tardado en manifestar su rechazo aduciendo que «no se deben polarizar los eventos culturales, no se puede ideologizar la cultura de Guadalajara con dinero público, no se puede promover desde el Ayuntamiento de Guadalajara aquello que haga apología del guerracivilismo, pues lo único que hace es reabrir heridas entre los guadalajareños y apuntalar un relato de nuestra historia más reciente sectario y partidista”.
Este tipo de declaraciones, realizadas al amparo de una institución pública, produce sonrojo entre los historiadores y representantes de asociaciones de víctimas de la guerra, de la represión y del exilio posterior. Para Almudena Cros, presidenta de la Asociación de Amigos de las Brigadas Internacionales, el portavoz municipal de VOX en Guadalajara «debería ser consciente de que en este país hemos vivido durante ochenta años los homenajes a los caídos de «la gloriosa cruzada» a los que se les ha otorgado siempre una superioridad moral respecto a las víctimas republicanas. En mas de cuarenta años de supuesta democracia, los nombres de las víctimas que apoyaban al fascismo y fueron asesinadas o muertas en campos de batalla están recogidos y decoran monumentos en iglesias y en cementerios por toda España, mientras casi cien mil víctimas asesinadas por tropas fascistas siguen en fosas comunes o a los lados de las carreteras y caminos, sin sus nombres y sin que sus familias puedan aún tener acceso a un entierro digno. Seguimos con esta división creada por los vencedores».
El lado oscuro de la Historia y sus sombras nos recuerdan una y otra vez que pese a que como dice el documentalista y portavoz del Foro por la Memoria de Guadalajara, Xulio García Bilbao, el fascismo fue derrotado en una gasolinera de Milán en 1945, -aludiendo a la ejecución de Mussolini por los partisanos-, y sus representantes actuales «no dejan de ser la caricatura de un conservadurismo trasnochado», el peligro acecha. ¿VOX Guadalajara, con quien va, con los nazis o con los aliados que conducían ese tanque?, se preguntan públicamente. A este respecto, bastaría con sostener una posición oficial clara y contundente desde el Estado, la que figura en los libros de Historia y se estudia en los programas escolares y las Universidades de todo el mundo. «Me provoca una inmensa vergüenza que en este país no haya habido monumentos ni medallas a los héroes de la Resistencia antifascista, de la manera en que estos héroes y heroínas son recordados en toda Europa. Basta pasear por Parma, Bolonia, París, Londres… para comprobar el respeto común a los ciudadanos y soldados que lucharon contra el Fascismo. Aquí siguen criminalizando a los maquis y a los héroes y heroínas de la Resistencia contra las tropas de Franco, Hitler, Mussolini y los mercenarios de Marruecos. Es francamente vergonzoso desde una perspectiva internacional, explica Almudena Cros, que el próximo día 25 de septiembre moderará en el Teatro Moderno la mesa redonda «La lucha contra el fascismo. Guadalajara 1936, París 1944», en la que participarán la profesora titular del Departamento de Historia de la Comunicación Social de la Universidad Complutense de Madrid, Mirta Núñez-Díaz Balart, el doctor en Historia Moderna y Contemporánea de la Universidad Autónoma de Madrid, Eduardo Montagut y el escritor y presidente del Foro por la Memoria de Guadalajara, Pedro García Bilbao.
Para la profesora y ponente, Mirta Núñez-Día Balart, la postura adoptada ante estas jornadas por el representante local de VOX se enmarcan dentro de un «pensamiento ultra«, ya que «es evidente que hay gente que no ha superado la mentalidad del franquismo, la mentalidad elaborada y difundida con todos los medios del Estado durante el franquismo, una mentalidad que luego en la transición no se adaptó a la democracia». En su opinión, la forma en que España ha moldeado su pasado reciente es una peculiaridad nacional motivada por el contexto de la dictadura y que contrasta con lo sucedido en el resto de Europa. «En todos los países europeos donde ha habido guerras intestinas, civiles, hay una versión desde el Estado de lo ocurrido. La diferencia con lo ocurrido en España es que aquí triunfó el fascismo y por lo tanto tuvieron desde el triunfo del golpe el 1 de abril de 1936 para crear un relato de lo ocurrido que ha estado infectado por la visión de los golpistas que fueron quienes desencadenaron la guerra civil. Y eso es un hecho indiscutible: los golpistas desencadenaron la Guerra Civil». Según la titular del Departamento de Comunicación Social de la UCM, «a partir de la transición y en la democracia hasta hoy, ha faltado valentía para poner las cosas en su sitio. Entre otras razones porque la ultraderecha no desapareció. Hoy está muy crecida y con una actitud lenguaraz sobre todos los acontecimientos de la vida española».
Para el historiador, doctor en Historia Moderna y Contemporánea en la UAM, Eduardo Montagut, la importancia de las jornadas programadas por le Ayuntamiento de Guadalajara estriba en tres pilares: «Dialogo, memoria y cultura. Vamos a dialogar y a crear un espacio de entendimiento. Eso nunca se ha hecho aquí pese a que en Guadalajara tuvo lugar la famosa batalla de la Guerra Civil. Me parece muy bien que las instituciones hayan hecho un esfuerzo por recordar y debatir. Se ha hecho ya en Cataluña, en el País Vasco, en Andalucía… también en Castilla-La Mancha; porqué no hacerlo en Guadalajara». En su opinión, este tipo de foros está dirigido a un público universal y no está adscrito a ninguna ideología y hace un llamamiento claro a los ciudadanos que se ubican al otro lado del espectro político. «La derecha se tiene que incorporar y entender que el franquismo fue un cáncer y que no fue equiparable en modo alguno a la República. El franquismo fue un régimen ilegitimo basado en la desigualdad y la persecución legal de los contrarios, olvidando a los demás españoles. La derecha tiene que aprender de la francesa, y no de Le Pen sino de Macron, Chirac...,de los conservadores británicos. Es compatible ser conservador y ser antifranquista», afirma.
El próximo día 23 la memoria contra el olvido se abrirá paso en Guadalajara por primera con respaldo público, algo que es muy valorado por los expertos invitados a los actos. Para la profesora Núñez-Díaz Balart, «es importante que sea el Ayuntamiento quien ejerza esta labor (didáctica). Desde un punto de vista institucional está defendiendo la democracia, no una visión partidista. Muchas veces los alumnos franceses saben mas de Historia de España que los españoles». Basta con abrir un libro de texto para comprobarlo, y en algunos casos, basta con escuchar el discurso manido de la extrema derecha y sus adalides para darse de cuenta de todo el camino que queda por recorrer.
La próxima semana en El Hexágono de Guadalajara más reflexiones en torno a la relación histórica de Guadalajara con la lucha antifascista, la dictadura y el exilio.
(*) A excepción de las dos obras de teatro, cuyas entradas tienen un precio de 8 euros.
A ver Gloria , si el ciclo es memoria contra el Olvido y pagados por los impuestos de todos (los que no hayan votado a Rianxares o al Coordinador del ciclo, Israel Calzado que iba en las listas del PSOE de Yebes-Valdeluz) tambien. Hubiera sido una oportunidad para recordar todos los hechos trágicos en Guadalajara antes, durante y despues de la Guerra Civil, asesinatos de religiosas en plenas calles de Guadalajara, fusilamiento de 300 civiles de «derechas» en la prisión provincia (nunca ha habido una placa en su recuerdo, solamente el cementerio de la carretera del Clavin) sin juicio previo (el intento de juzgar estos hechos por parte de la Repuclica fue fustrado, pero debe constar que los jueces de la republica intentaron juzgar esto hehos) , los bombardeos franquista de la calle mayor, los fusilamientos por parte de los franquistas en el cementerio municipal (incluido el último alcalde elegido democráticamente de Guadalajara) o el apoyo del anarquista Cipriano Mera al Coronel Casado desde Guadalajara con sus tropas hasta Madrid contra la hegemonia Comunista Stalinista en el alto Mando Republicano, episodio no muy recordado y que supuso adelantar el fin de la guerra civil. Por supuesto esta bien volver a recordar a los españoles muertos en Mauthause (y de hecho se les ha puesto un monumento en la Concordia) En definitiva creo que se podrían haber hecho unas jornadas de memoria de una Guerra Civil en Guadalajara independiente, exponiéndose todos los hechos, e incluso con historiadores que contaran los mismos hechos desde distintos puntos de vista, todo ello sería muy enriquecedor y mas que nada para que no se vuelva a repetir y los ciudadanos seamos consciente de todos los trágicos sucesos que se produjeron y no confiemos en los políticos que solo quieren la confrontación de ciudadanos.
En cuanto a las fosas y cunetas hay que levantarlas todas pero tabmíen las de miles de soldados desaparecidos de ambos bandos que quedan en los campos de batalla y que pareceser que no interesan a nadie, es muas muchas fosas que se han abierto cuando se ha visto que eran de soldados se han vuelto a cerrar. Creo que esos seres humanos se merecen un enterramiento digno.
Me gustaMe gusta