
José Sánchez de Marcos, testigo en Fuentelahiguera de un fenómeno extraordinario en 1977. En la imagen con el autor de estas líneas.
Por David Cuevas (*).
José Sánchez de Marcos fue testigo de algo. Mi compañero Ángel Arroyo y yo fuimos a entrevistarle, tras ponernos sobre su pista el bueno de José Luis Blas, otro testigo de sucesos de tipo lumínico al que ambos visitamos en varias ocasiones. De modo que el martes 21 de agosto de 2017, nos desplazamos a Fuentelahiguera (Guadalajara). Era un pueblo pequeño, con lo que fuimos al lugar de peregrinaje más habitual en este tipo de poblaciones. ¿La iglesia? No. El bar. Y efectivamente, no hubo que buscar más. Ahí estaba. Hablamos con él, le mostramos una antigua publicación de tirada reducida subvencionada por el consistorio en la que resumía su experiencia y accedió a contárnosla. Le llevamos a la zona del avistamiento, dejándonos los neumáticos en el intento por lo agreste de la zona y al llegar, bajamos del coche y nuestro protagonista empezó a hablar.