Por Sonia Jodra

Las comunicaciones en el Corredor del Henares marcan la línea de crecimiento económico en una zona en la que cada día miles de personas se desplazan a su lugar de trabajo, estudios o por motivos de ocio y salud. Nos guste más o menos, lo cierto es que nuestro valor diferencial como territorio es nuestra cercanía con Madrid. Madrid, la gran urbe en la que ocurre casi todo, nos convierte en un destino interesante para empresas que quieren estar próximas a los nodos de comunicación más importantes del país y para personas que ocupan alguno de los miles de puestos de trabajo que oferta la Comunidad de Madrid, pero que no pueden permitirse los precios de nuestros vecinos.
Por eso es tan importante cada mejora que se realiza en las comunicaciones en esta zona. Cada nuevo tren que circula por la línea de ferrocarril Madrid-Barcelona constituye un motivo más de desarrollo en el Corredor del Henares. A partir de septiembre, se triplica el número de trenes semi directos a Madrid, los llamados Civis. Si ahora son 8 los trenes que reducen su itinerario de 79 a 57 minutos, tras el verano serán 24. Se triplican los servicios rápidos que nos unen con la capital de España. Y sin duda serán muchas las personas que se beneficien de esta medida adoptada por el Gobierno de España a petición de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y de ayuntamientos como el de Azuqueca, que ya hace cuatro años solicitaba al anterior gobierno el incremento de estos servicios.
La apuesta por garantizar transportes públicos de calidad enraíza con la manera de entender la movilidad en términos de sostenibilidad. Si el tren funciona bien, si los horarios se adaptan a las necesidades de trabajadores y estudiantes lograremos quitar coches de la carretera, reducir la huella de carbono e impulsar hábitos de vida más saludables.
En el lado negativo, como siempre, el tren convencional que une la capital con Soria y con Zaragoza, una línea en la que cada día hay menos viajeros y como hay menos viajeros, hay menos trenes. La espiral de la despoblación que sigue desmantelando servicios. Ojalá encontremos algún día la fórmula para distribuir un poco mejor el desarrollo entre los diferentes territorios. La realidad, ahora, es que mientras el Corredor del Henares avanza a toda velocidad, las zonas rurales cada vez ven menos trenes a los que subirse para luchar contra el vaciamiento que no cesa.
En septiembre, las personas que cada día se desplazan hasta Madrid por motivos de trabajo o estudios, fundamentalmente, tendrán mejores opciones para optimizar su tiempo. Muy buena noticia esos 24 Civis. ¡A disfrutarlos!