
El desaparecido gimnasio Zest de Guadalajara
Por Sonsoles Fernández Day
Ya están aquí otra vez, como las rebajas, como las ediciones por fascículos y como los catarros y la tos consecuencia de las salidas nocturnas y las bajas temperaturas. En los primeros días de enero nos pesan los kilos que hemos cogido después de las celebraciones navideñas. Empezamos diciembre calentando motores con las comidas y las cenas de empresa. Después resultan imprescindibles las celebraciones con cada grupo de amigos, los de la panda, los del gym, los del club, los del cole… Asistimos a los vermuts interminables y cerramos el círculo con todos los eventos familiares alrededor de la mesa. Hay días en los que se junta la comida con la merienda y aunque no ibas a cenar, acabas picando algo. Durante todo el mes de diciembre y principio de enero, se come y se bebe demasiado. Y como colofón definitivo, acabamos las fiestas merendando roscón con chocolate, algo ligerito para volver a la rutina de colegios y trabajo al día siguiente.