
Emiliano García-Page (PSOE) y José García Molina, de Podemos (2º por la izq.), el pasado lunes durante la presentación de los Presupuestos de Castilla-La Mancha para 2016. // Foto: JCCM
Por Raquel Gamo
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y el líder regional de Podemos, José García Molina, anunciaron juntos el pasado lunes los Presupuestos de Castilla-La Mancha para 2016. La presentación llega con retraso por la evidente necesidad que los socialistas tenían de alcanzar con la formación morada un acuerdo que, salvo sorpresas, garantiza su aprobación en las Cortes de Castilla-La Mancha. Las cuentas públicas de la región suponen una vuelta a la normalidad que precedió el Cospedalato. Básicamente, porque tienden a recuperar los niveles previos a 2011 en el gasto social, cuyos recursos aumentan un 7% (alrededor de 315 millones más que el año pasado). Este bloque se come alrededor del 70% de un presupuesto que asciende a 8.420 millones de euros, 214 más que en 2015.