
Imagen del Festival Cruilla 2016 de Barcelona. / Foto: M.P
Por Míriam Pindado
Una sombrilla con el Mediterráneo de fondo, un libro sobre el césped de la piscina, unas gafas junto a lo que parece un gin tonic, el atardecer con dos copas de vino en el Cantábrico o una paella con color levantino. Son las nuevas postales veraniegas de los millennials. Las instantáneas geolocalizadas que inmortalizan el verano de nuestros allegados en las redes sociales y que nos descubren las últimas tendencias estivales.