
El grupo expedicionario con el pico Ocejón al fondo. //Foto: S. N.
Por Patricia Biosca
Ese lugar común de “año nuevo, propósitos nuevos” nos llega a todos. Con más fuerza a los herederos sin drogas ilegales de la Generación Beat, los que compartimos el gusto por la juerga más o menos legal y la letra más o menos bien escrita, aunque sin trabajos que nos lleven a la gloria (de momento, que confiamos en nuestro ego). Así que un nutrido grupo de cuatro periodistas de diferentes pertenencias se embarcaron en la arriesgada empresa de subir el Ocejón el pasado domingo. Su objetivo: cambiar las resacas por actividades de provecho al aire libre, como promesa de la nueva etapa que se abría después de Navidad. Pero, por supuesto, todo no iba a salir según lo planeado y una tal Gloria también se quiso añadir al plan…