Resulta que la pandemia nos había quitado más cosas que las que únicamente echábamos en falta. Ahora las vamos recuperando en una especie de desperezamiento del largo aletargamiento en el que tantas crisis nos tienen sumidos. Esta semana hemos conocido que en las calles de Umbralejo de nuevo habrá chavales descubriendo que los tomates no se producen en la trastienda de Mercadona y que las abejas, además de ser molestas y picar si las cabreamos, son grandes productoras de miel, cera y demás ungüentos que hasta ahora no entraban en su joven conocimiento. El Programa de Recuperación de Pueblos Abandonados es tan bonito como este pueblo serrano, cuya visita es obligada para el que quiera disfrutar de la Arquitectura Negra de Guadalajara. Ni gamificación, ni competencia digital, ni robótica están a la altura de las enseñanzas que las y los estudiantes pueden adquirir pasando una semana en Umbralejo. Así que, ¡ánimo, docentes! El futuro os agradecerá este esfuerzo.
Nucleares, trasvases… y ahora polígonos fotovoltaicos
De un tiempo a esta parte son innumerables los proyectos de megaplantas de energías renovables que sobrevuelan nuestra provincia. Con el pretexto de realizar una transición energética que se presenta como inaplazable, en Guadalajara, como en casi toda España, tanto el Gobierno central como el autonómico están promoviendo este proceso sin ningún tipo de planificación ni atención de las necesidades reales (demográficas, energéticas y medioambientales) de nuestra tierra, optando por el modelo llamado centralizado, de gigantescas plantas eólicas y fotovoltaicas.
El resultado de este proceso, si no se remedia, va a ser la expansión masiva y no planificada de energías renovables ocupando miles de hectáreas con gigantescas plantas solares, eólicas, estaciones eléctricas y líneas de evacuación, y la destrucción de numerosas zonas de cultivo que serán claves en un contexto de cambio climático. Con ello, los efectos de esta transformación serán muy negativos para nuestros pueblos, dado que estas instalaciones industriales NO crean puestos de trabajo estables, ni durante ni después de su construcción, a la vez que los destruyen en el sector agropecuario, cinegético y turístico, agravando los problemas de despoblación, envejecimiento y falta de cohesión comunitaria que sufre Guadalajara. De ellos se aprovechan las empresas para agilizar sus proyectos, ya que cuentan a su favor con una menor capacidad de reacción y movilización en estas zonas despobladas, puesto que cuanta menos gente y cuánto más vulnerable su situación, más fácil es su negocio.
Muchas de estas instalaciones afectan a áreas de alto valor agrícola, cinegético, paisajístico y ecológico, afectando gravemente a la biodiversidad, poniendo en peligro a numerosas especies amenazadas y, arruinando décadas de políticas de conservación.
Desde nuestra perspectiva, todo este proceso se está fomentado desde las distintas administraciones públicas cuando, precisamente, son estas las que deberían velar por una planificación que garantice una transición realmente ecológica y justa en términos territoriales.
Como una imagen vale más que mil palabras, el mapa que adjuntamos más abajo da idea de la magnitud de la situación. En él, se puede observar cómo a los proyectos ya en funcionamiento, como una central nuclear, centrales eléctricas y una amplia superficie dedicada a la energía eólica y a la energía fotovoltaica, en la actualidad se ciernen sobre la provincia numerosos megaproyectos dedicados a la energía fotovoltaica.
Esta situación es especialmente grave en la zona de La Campiña y La Alcarria donde, si se llevan a cabo los proyectos planificados, estos supondrán un enorme impacto sobre el territorio, hipotecando enormemente su desarrollo y afectando severamente a la biodiversidad.
Como se puede observar en el mapa, son numerosos los proyectos que están proyectados, a pesar de que solamente están recogidos aquellos que han sido publicados en el Boletín Oficial. Además de estos, existen innumerables instalaciones más como, por ejemplo, y por citar solo algunas, las previstas en Torija, El Casar – Mesones, El Cubillo de Uceda, Valdenuño Fernández, Fuentelahiguera, Usanos, Yebra, Pastrana, Zorita, Valdegrudas, Caspueñas, Budia, San Andrés del Rey o Fuentes de la Alcarria.
Con todo ello, parece razonable pensar que el modelo territorial que se está cerniendo sobre la provincia para el siglo XXI es, por un lado, el de un Corredor del Henares y las zonas más cercanas a Madrid en la A2 orientados fundamentalmente a la logística; otras superficies orientadas a la conservación de algunas zonas rurales como el Alto Tajo o la Sierra Norte; y, por último, la conversión del resto de la provincia en grandes extensiones de polígonos solares para la producción de energía orientada al consumo de otros lugares, fundamentalmente Madrid.
De este modo, se da continuidad al modelo de desarrollo extractivo que se ha impuesto sobre la provincia desde mediados del siglo XX. Si en decenios anteriores era la población de estas zonas (forzada a la emigración), su agua (pantanos y trasvases), y su energía (nucleares) la que estaba al servicio de otras áreas geográficas, hoy es su territorio el que se pone a disposición de intereses ajenos, mientras nuestros pueblos languidecen por falta de servicios, trabajo e innovación y ven cómo se debilita aún más su débil tejido social y productivo. Todo ello nos lleva a pensar que estamos asistiendo a una verdadera colonización energética de la provincia de Guadalajara.
Frente a este modelo, hay alternativas. Queremos potenciar un modelo distribuido, basado en pequeñas instalaciones que, junto con el autoconsumo y las comunidades energéticas, permitan aprovechar las virtudes de las energías renovables y reducir sus impactos, acercar la producción de energía a los puntos de consumo y favorecer la democratización de la energía y la reducción de la pobreza energética. Y, sobre todo, queremos que se aplique un criterio científico, ordenado y planificado para las grandes plantas que inevitablemente haya que construir, consensuado con los agentes sociales del territorio para evitar que, una vez más, sean las zonas rurales de nuestra provincia, deprimidas y azotadas por la despoblación, las sacrificadas a costa del desarrollo de otros territorios, y para evitar que se deje en manos de la voracidad del mercado y de unas empresas que, además, están favoreciendo una nueva burbuja especulativa.
Por supuesto, es inevitable emprender una transición ecológica. Pero esta debe ser justa, beneficiando a las personas y no solo a las grandes empresas, y con respeto a los territorios, a las economías locales y a la biodiversidad. Para que unas zonas, ya deprimidas y azotadas por la despoblación, no sean de nuevo las perdedoras y sacrificadas.
Por todo ello, hemos convocado una concentración el sábado 11 de junio a las 12:00 en la plaza de Santo Domingo de Guadalajara, para mostrar nuestro desacuerdo ante esta situación y expresar así nuestra preocupación por este sinsentido que amenaza nuestra provincia.
(.) ALIENTE en Guadalajara.
El martes 22 de marzo presentaba en rueda de prensa la plataforma ALIENTE en Guadalajara para denunciar que, en Castilla-La Mancha y, en particular en Guadalajara, tanto el Gobierno central como el autonómico, han optado por un modelo de transición energética basado en la implantación de grandes parques eólicos y fotovoltaicos a gran escala que están provocando la ocupación de miles de hectáreas de suelo rústico con afecciones muy negativas a áreas de alto valor agrícola, cinegético, paisajístico, ecológico, social y cultural.
Se trata de la formalización a nivel provincial de la organización ALIENTE, creada en 2020, cuyo posicionamiento en biodiversidad es apoyado por más de 270 investigadores. ALIENTE se ha convertido en una alianza de ámbito nacional que aglutina a más de 205 asociaciones y entidades sin ánimo de lucro. Lucha por un modelo más racional y distribuido, basado en el ahorro y la eficiencia energética, en el autoconsumo y las comunidades energéticas.
El presidente Pedro Sánchez, ayer por la tarde. // Foto: mediterraneodigital.com/
Por Álvaro Nuño.
Confieso que este no era mi tema para hoy y, aún después de escuchar primero al presidente del Gobierno en una alocución emitida en directo por todos los medios de comunicación a primera hora de la tarde, y después al presidente de Castilla-La Mancha aplicando las normas estatales al ámbito autonómico, aun así estaba dispuesto a escribir sobre el polémico vertedero que ha hecho levantarse a una gran parte de municipios del Corredor del Henares contra él, los del PP haciendo bandera de la protesta popular y los del PSOE diciendo que no lo querían tampoco pero dándolo ya como una cosa fuera de su alcance y sólo en manos de los técnicos de medio ambiente de la Junta.
Protesta de Ecologistas en Acción contra el Cementerio Nuclear. // Foto: Ecologistas en Acción
Por Alberto Mayor Barahona*
Durante la década de los 80 y 90, el movimiento ecologista se encontraba dividido en múltiples organizaciones, en su mayoría de ámbito local. Pese a los importantes intentos de coordinación existentes, aquella “sopa de siglas”, junto con la debilidad estructural de los grupos, dificultaba conseguir avances importantes. Por ello, en 1996 iniciamos un largo pero intenso proceso de unificación de buena parte del movimiento ecologista. En diciembre de 1998 nació la confederación de Ecologistas en Acción, en la que se integraron más de 300 grupos. Sigue leyendo →
Dos de los repobladores de Fraguas rehabilitando un edificio en ruinas. // Foto: Colectivo Fraguas
Por Álvaro Nuño.
Bajo el lema «Fraguas revive: ¡repoblar no es delito! Contra la despoblación rural, pueblos vivos», la Asociación de Repobladores Rurales de la Sierra Norte y la Plataforma Antirrepresiva de Guadalajara han convocado mañana sábado una manifestación en apoyo a los seis jóvenes denunciados por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha por repoblar sin permiso Fraguas, un pueblo abandonado en los años sesenta de esa zona de la provincia, y condenados por cometer un delito contra la ordenación del territorio y de usurpación, a un año y medio de cárcel, a una multa de 2.700 euros, a pagar la demolición de las casas construidas desde la primavera de 2013 sobre las ruinas de lo que fue un pueblo y a dejar como estaba la finca ocupada. Los manifestantes partirán desde la Consejería de Agricultura -que es el organismo que les ha llevado a juicio- a las 12 de la mañana y subirán hasta la Delegación de la Junta en la Calle Mayor.
A pesar de que nació como la lucha de unos ecologistas agoreros que daban más importancia de la debida a unos cuantos indicadores al azar, el cambio climático se ha ganado con el paso de los años un merecido lugar en la agenda pública, por nuestro propio bien, convenciendo incluso a los más excépticos de que hay que tomar cartas en el asunto. A nivel de instituciones públicas, nadie duda ya de poner en marcha sus medidas, con el único interrogante de si la intensidad de las mismas es la adecuada. El Ayuntamiento de Guadalajara ha anunciado esta semana su compromiso de reducir sus emisiones de gases nocivas en un 40 por ciento. Sigue leyendo →
Los nuevos moradores de Fraguas posan con algunos de los antiguos residentes en los restos del pueblo abandonado. // Foto: Colectivo Fraguas
Por Borja Montero
Vivimos en un mundo lleno de paradojas, cada vez más; no ha discusión sobre ello. Según va evolucionando la especie en materia tecnológica y económica, afrontan nuevas incógnitas sobre cómo preservar a la vez el estilo de vida que tanto ha costado construir y el planeta que ha de sustentar con sus materias primas y sus condiciones medioambientales soportables el bienestar físico de sus moradores. El dilema entre la ecología y la economía, entendida como garante de un insostenible progreso constante y no como una forma de repartir los recursos existentes de forma eficiente, nos proporciona variados ejemplos de este tipo de ironías y paradojas que nos obligan a priorizar qué queremos más: un mayor bienestar o un bienestar más largo. Sin embargo, en ocasiones, un mismo fin también nos lleva a estos cruces de caminos de difícil solución. Esta semana se inicia el juicio por la repoblación del pueblo abandonado de Fraguas. Sigue leyendo →
Imagen tomada por el Seprona de la Guardia Civil tras varios meses de vigilancia en distintas zonas de la Sierra Norte de Guadalajara. // Foto: Guardia Civil
Por Borja Montero
Los relatos de ciencia ficción y fantasía siempre han tenido mucho éxito de público por su capacidad de mostrar con cierta verosimilitud mundos alternativos y peripecias alejadas de las normas de la lógica imperantes en nuestro día a día. Sin embargo, y aunque no se trate de un principio irrefutable, la navaja de Ockham nos recuerda a cada momento que «la explicación más sencilla suele ser la más probable», haciéndonos desistir de la creencia en la intermediación tangible de brujas, duendes o extraterrestres en los sucesos cotidianos. En la actualidad guadalajareña, cuando uno rebusca, también se dan casos de misterios y leyendas que es interesante desentrañar.
Como parece de obligación en el periodismo actual, vamos a hablar del tiempo. Y en esta ocasión no se trata de informar de que nieva en invierno (cierto que cada vez más tarde) o de que hace calor en verano (cierto que cada vez más intensamente), como se empeñan en hacer los medios de comunicación, sobre todo las televisiones, sino de poner sobre la mesa la evidencia de que hemos pasado otra semana sin llover y, a pesar de que se anuncia el final de la tranquilidad anticilónica para uno de estos días, tampoco se espera que las precipitaciones sean muy persistentes en breve. Esto hace que el tema real de estas líneas sea mucho más dramático. Y es que los ayuntamientos de la provincia han comenzado a anunciar las medidas a tomar para intentar reducir su consumo y prolongar un poco más las exiguas reservas que nos proporcionan los embalses. Sigue leyendo →
Guadalajara tiene una pantalla que informa de la concentración de diferentes contaminantes en el aire. // Foto: guadaque.com
Por Borja Montero
El ser humano siempre ha sentido una tremenda fascinación por las cosas ocultas, lo que se esconde detrás de lo evidente. Más allá de lo de mirar por el ojo de la cerradura de una puerta cerrada o pegar la oreja al tabique de la habitación contigua, esta curiosidad de los descontentos con las explicaciones fáciles y los disconformes con los usos y costumbres ha estado en la base de multitud de descubrimientos que han hecho avanzar la humanidad. A pesar de ello, y cada vez con más frecuencia, el foco de atención de los medios de comunicacion y nuestros convencinos en las redes sociales se queda precisamente en lo cosmético, lo anecdótico, con aquello que se puede ver con un simple vistazo (y con lo que se pueda hacer un comentario ingenioso), como en aquel dicho popular sobre un dedo que señala la luna y un tonto que mira al dedo. Muchos análisis se quedan en la boina, y no se dan cuenta de todo lo que hay debajo.