Por Sonsoles Fernández Day
La Policía Nacional desmantelaba el pasado 11 de octubre en Fontanar una plantación ilegal de marihuana en el interior de una nave. Cuatro días antes se conocía la noticia de otra intervención policial en Cabanillas del Campo, donde se utilizaba una vivienda de una familia aparentemente normal, eso dice la prensa, pero no sabemos lo que piensa el vecino, para mantener una ‘sofisticada’ plantación de marihuana. En el mes de septiembre la Guardia Civil desmanteló dos plantaciones, una en Chiloeches y otra en Fuentenovilla. En julio hubo 11 detenidos de una misma familia en Torrejón del Rey, dedicados a huertos ilegales en sus casas. Y así podemos seguir enumerando casos de muchos meses atrás. Hace tiempo que el descubrimiento de otra plantación indoor es una noticia habitual. Es todo un negocio, bastante más rentable que dejarse el lomo en el campo o en una nave de logística.
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